ERP. El llamado desesperado de Huaquilla en la provincia de Morropón, la de los pobladores de Parachique en la provincia de Sechura, el grito desesperado de la población de Mallares, incrementaron los efectos negativos de las lluvias en la región Piura. En Tambogrande se desbordó el río Piura, las quebradas y los drenes causando destrucción y tristeza en la lluvia que aminoró en la zona urbana como Sullana y Piura, pero fue dura en las zonas rurales.
Chulucanas fue la gran perjudicada en la mayor parte de poblaciones de la margen derecha e izquierda al río Piura; el desborde se produjo en la Huaquilla perjudicando a unas 200 personas que residen en este caserío; el pueblo de Buenos Aires, igualmente fue afectado por el desborde y por la densidad de las lluvias, que fue más intensa en la provincia de Morropón.
El Río se desbordó en Morropón - Buenos Aires, afectando a Pueblo Nuevo, Santa Rosa, Morroponcito, Maray,y otros caseríos ribereños los cuales en gran parte tuvieron que evacuar de la zona hacia las zonas altas, para protegerse de la inclemencia de las lluvias y de la crecida del río.
El río Grande que forma parte del cauce del río Piura, se salió por las áreas de cultivo y poblaciones ribereñas que forman caseríos. Asimismo el Río Piura en la zona del Ñácara se desbordó por el desvío a Huápalas y La Encantada un caserío de artesanos y ceramistas de la región Piura.
En Tambogrande el río se desbordó y perjudicó a la población del asentamiento humano Froilán Alama, y otras zonas bajas de este distrito piurano, el cual se vio afectado por la creciente del río Piura e igual por la densidad de las lluvias que tuvo episodios fuertes y débiles, pero igualmente de destructores.
En la provincia de Sechura, la capital provincial sufrió los efectos de la lluvia y perjudicó algunas caletas como Parachique, cuya población pedía apoyo para evitar los estragos causados por las lluvias y por el río en su parte final.
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