ERP. El alto mando de la Policía Nacional del Perú, estuvo convocando a una gran movilización que le denominaron por la paz, alejándose de los preceptos constitucionales que le establece los límites y roles. En vídeo y también en comunicados, llamaban a los peruanos y peruanas a concurrir a este evento, portando polos blancos, en señal de lo que buscaban. El Ministerio del Interior, decidió dejar sin efecto la misma.
“Queridos hermanos invitamos a la gran marcha nacional por la paz que se llevará a cabo este martes 3 de enero a las 3 de la tarde en todo el Perú, en las plazas de armas de los departamentos, de las provincias y distritos, en Lima será en el Campo de Marte, ni una gota de sangre más, ni un peruano más herido, no a la violencia (…)” arengaba el oficial Óscar Arriola, convocando incluso a las Iglesias para que participen en ellas.
De inmediato, el constitucionalista Omar Cairo, alertó que esto no puede hacer la Policía Nacional del Perú y lo mismo sucedió con el abogado Carlos Rivera Paz, conocido defensor de los derechos humanos, quien al enterarse que ha sido dejada sin efecto, expresó que “La infracción constitucional está cometida y el ministro del Interior es el principal responsable”.
Tras ser desautorizados para la organización de una movilización, que solo busca soliviantar y enfrentar a peruanos contra peruanos, la Policía Nacional emitió un comunicado, recordando sus funciones y competencias, lo que no se encuentra en entredicho. Sin embargo, marchas de esta naturaleza, con una pretensión escondida, infringe el rol que tiene esta institución.
Como se tiene conocimiento, peruanos y peruanas de diversas regiones del país, estarán retomando paralizaciones y movilizaciones, en rechazo del gobierno cívico- militar que presidente Dina Boluarte, exigiendo el cierre del Congreso y prontas elecciones generales. Asimismo, forma parte de sus demandas, lograr justicia por el asesinato de más de 25 personas.
