ERP. Difíciles los momentos que vive el país, consecuencia de la inestabilidad política generada desde el Congreso. Actores políticos confrontacionales y recalcitrantes nos recuerdan que este colegiado, no difiere mucho de los anteriores y que la conducta de la mayoría representada por Fuerza Popular y sus bancadas satélites, está signada más por los intereses personales, de grupo y por su poca responsabilidad con el país.
Con la mayoría congresal lograda por una Ley que distorsiona los resultados y que excluye a las minorías, Fuerza Popular pudo quizá implementar cambios sustantivos para mejorar el funcionamiento del Estado, nada de ello ha sucedido y al contrario son protagónicos en la vindicta, en el debate pueril y sobre todo o más que todo, en el blindaje hacia personajes vinculados a la corrupción.
Bastaría mirar la lista de acciones y decisiones realizadas. Vacancia de Pedro Pablo Kuczynski, separación de Kenji Fujimori y sus seguidores, la protección de César Hinostroza y quien fue liberado de los cargos más comprometedores, lo propio con el exfiscal de la Nación Pedro Chávarry y en esta semana, la búsqueda de elegir miembros del Tribunal Constitucional a medida de sus futuros intereses.
Varios temas forman parte de la crispación pública y de las prioridades de un Congreso sin legitimidad social. Primero, está la búsqueda de la libertad de su lideresa, quien se encuentra recluida en una cárcel del país, después el rol profujimorista del presidente Pedro Olaechea y sus desatinadas declaraciones, las cuales las realiza por escrito y con puntos y coma, demostrando que es incapaz de urdir un discurso espontáneo.
Parlamentarios hicieron el ridículo en reunión con Comisión de Venecia
Luego, la oposición al proyecto de recorte del mandato presidencial y congresal propuesto por el ejecutivo, la invitación a constitucionalistas y economistas afines y hasta a la Comisión de Venecia, para hacer el ridículo y exponer trivialidades, sin entender que esta instancia europea, se pronuncia sobre temas jurídicos y no por los berrinches ya conocidos de Vilcatoma, Becerril, Salgado y otros.
En realidad, la capacidad expositiva de los parlamentarios, hicieron el ridículo frente a los representantes de la Comisión de Venecia y pese a ello, no se percatan que el problema no se encuentra en el Ejecutivo, sino en la composición misma de esta organización política, que se encuentra seriamente infestada por actos ilegales y punibles y que, por ello, han sido sometidos a la justicia.
Fuerza Popular y su poca permeabilidad a crear consensos
Dar prioridad y resolver política y constitucionalmente el recorte del mandato presidencial y congresal, es lo de menos para este Congreso. Observamos, que esta aviesa mayoría ha logrado convencer a pequeños grupúsculos escindidos de otras organizaciones para sumarlos a su cometido en su afán de oponerse al adelanto de elecciones, tan es así, que han pasado 2 meses desde su presentación al Congreso y todo hace suponer que no pasará.
Pero no solamente es el rechazo a este proyecto, sino es el avasallamiento de responsabilidades serias, como es elegir a los miembros del Tribunal Constitucional. Llama la atención la celeridad y rapidez para impulsar este proceso, lo único que les interesa es protegerse a través de la manipulación de una posible disolución. Para ello, requieren votos que los protejan y las otras motivaciones están relacionadas con exculpar a Keiko Fujimori y su padre y a varios parlamentarios que se encuentran comprometidos en el tema de Odebrecht.
Fuerzas políticas y población vienen protestando en calles
Salir de este embrollo, es posible con las fuerzas de la calle, conforme sucedió para sacar del poder a Remigio Morales Bermúdez, igualmente como aconteció con el gobierno de Fujimori en la parte final o como se reprobó el indulto un 24 de diciembre de 2017 al expresidente Alberto Fujimori. Esa será la única forma de tener consecuencias diferentes; por el momento, como están las cosas, todo hace suponer que regresaremos a esa etapa de lo peor del fujimorismo y si es lamentable.
