ERP. Con la finalidad de prevenir delitos contra la salud pública y garantizar la inocuidad de los alimentos que se expenden a la población, el Ministerio Público, a través de la Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Talara, realizó un operativo inopinado de control sanitario en diversos establecimientos comerciales de la ciudad, entre ellos centros comerciales, panaderías, pastelerías y bodegas.
La diligencia fue encabezada por las fiscales Carmen del Rosario Ojeda Cherres y Victoria Espinoza Sánchez, del Segundo Despacho de la Primera Fiscalía Penal Corporativa de Talara, y contó con el apoyo de la Subgerencia de Abastecimiento y Comercialización de la Municipalidad Provincial de Talara, médicos cirujanos, fiscalizadores municipales y efectivos de la Policía Nacional del Perú de la Comisaría Sectorial de Talara.
Durante el operativo se verificó el cumplimiento de las normas de salubridad, la vigencia de los registros sanitarios, las fechas de vencimiento y las condiciones de almacenamiento de los productos alimenticios. En el establecimiento Plaza Vea se constató que las áreas de carnes, embutidos y panetones cumplían con la normativa vigente, contando con los permisos municipales y condiciones adecuadas de conservación.
Resultados similares se registraron en las tiendas Mass de Talara Alta y del Mercado Central, donde los productos perecibles y no perecibles se encontraban en buen estado y dentro de los plazos establecidos.
Sin embargo, en otros locales se detectaron graves infracciones sanitarias. En la panadería Nova Pan se hallaron utensilios en mal estado, productos sin fecha de vencimiento y alimentos deteriorados, por lo que se procedió al decomiso correspondiente. En la pastelería Negociaciones Meylín EIRL se incautaron panetones que no contaban con registro sanitario ni fecha de vencimiento.
Asimismo, en la tienda comercial “Gisselly” (Milo) se decomisaron diversos productos y se dispuso la clausura temporal del establecimiento debido a la presencia de insectos y hongos en las áreas de almacenamiento. De igual modo, en la panificadora “Jehová es mi pastor” se tomaron muestras de pan para su respectivo análisis, ante presuntas deficiencias en las condiciones de producción, mientras que en la pastelería “Tortas Meylin” se decomisaron panetones que carecían de registro sanitario e información obligatoria para su comercialización.
El Ministerio Público exhortó a los responsables de los establecimientos a cumplir estrictamente con las normas sanitarias y a abstenerse de comercializar productos no aptos para el consumo humano. Asimismo, informó que estos operativos preventivos continuarán durante el mes de diciembre, con el objetivo de salvaguardar la salud de la población, especialmente en el marco de las festividades de fin de año.
