ERP. Gregorio Santos Guerrero, es el candidato presidencial de la agrupación Denmocracia Directa. Se encuentra en prisión por presuntos actos de corrupción; sin embargo no ha sido sentenciado hasta el momento. Anteriormente postuló al gobierno regional de Cajamarca y pese a su condición de presidiario, salió elegido y ahora pretende hacer lo mismo para la presidencia de la República.
El director ejecutivo de Proética, Walter Albán, opinó que la postulación del encarcelado gobernador regional de Cajamarca, Gregorio Santos, a la Presidencia de la República debería ser motivo de revisión en el Congreso para aplicar futuras reformas.
"Es un tema polémico y opinable que merece una revisión, como tantos otros que han quedado en el tintero del Congreso", señaló a la Agencia Andina. Sin embargo, no se expresa nada respecto a la situación de la administración de justicia en Perú, donde es simple ser encarcelado, estar algunos años preso, para luego ser declarado inocente y culpable.
En el caso de Santos, explicó que si bien está privado de su libertad de manera provisional, dado que no tiene condena, se apeló al principio de presunción de inocencia para aceptar su inscripción como candidato por Democracia Directa.
Consideró, sin embargo, que ello puede llevar a que "cualquiera que (todavía) no sea condenado participe en las elecciones", lo que no contribuye al proceso en sí.
Por eso, indicó Albán, se debe establecer una serie de restricciones al principio de inocencia, en base a las características y circunstancias determinadas.
"Cuando se trate de determinados delitos de mayor gravedad y cuando haya no solo una denuncia fiscal, sino una acusación fundamentada en elementos suficientes de que pueda haber responsabilidad, ahí debe fijarse un límite", argumentó.
Los cargos contra Gregorio Santos Guerrero, aún se mantienen sin ser confirmados y se cree que el objetivo de encarcelarlo, tuvo sus cimientos en la intimidación para que deje de oponerse a los proyectos mineros en Cajamarca.
