Sullana. A fin de proteger la ciudad y no generar más caos vehicular, la comuna provincial, alista un proyecto de ordenanza para declarar en emergencia la infraestructura vial de Sullana que actualmente se encuentra deteriorada, tras el paso de vehículos interprovinciales (ómnibus) que brindan el servicio Sullana – Piura.
Esta medida evitará que se agudice un conflicto social entre los vecinos de las calles afectadas y los transportistas, debido a que se oponen a que los buses circulen muy cerca de sus viviendas, poniendo en riesgo la integridad física de los vecinos, tal y como lo advirtió el presidente de la comisión de transportes, Víctor Campos Castillo.
Por ese motivo, ayer martes se reunieron nuevamente los funcionarios ediles encabezados por el gerente municipal, Vladimir Crisanto Plasencia y la gerente de Desarrollo Económico Local, María Panta Morales, con los empresarios transportistas de GECHISA, EPPO, ETHMOPESA y Turismo del Norte para determinar, la ubicación de sus nuevos terminales o embarcaderos provisionales en las afueras de la ciudad, por un lapso de 90 días, mientras dure la situación de emergencia por el período lluvioso.
Pese a que en un inicio algunos integrantes de GECHISA, se mostraron renuentes a conseguir un local provisional para brindar el servicio, se comprometieron a determinar un nuevo terminal en la Urbanización Santa Rosa. Cabe indicar que EPPO ya cuenta con un lugar donde reubicarse, el cual se ubicará entre las calles San Marcelo y El Rosario, en el mismo sector.
Los funcionarios ediles desestimaron el pedido de algunos transportistas, quienes solicitaron que se les entregue por ese lapso el local del campo ferial para albergar a todas las empresas involucradas, sin embargo, el gerente municipal, Vladimir Crisanto Plasencia, señaló que el recinto aún no cumple con los requerimientos técnicos para dicho fin, además de significar un grave riesgo el posible cruce intempestivo de la carretera Panamericana Norte.
