Es una de las pocas zonas que cuenta con cámaras de última generación, alarmas y tranqueras
ERP. Si bien la Residencial Angamos, Primera Etapa, figura como una de las zonas consideradas de mayor incidencia delictiva en la ciudad de Piura, también es una de las zonas que a través de sus directivos ha desplegado la mayor cantidad de esfuerzos para dotarla de las mejores condiciones de seguridad y disminuir ese estado grave de indefensión, aseguró la presidenta de la Juveco (Junta Vecinal Comunal), Roxana Luque Pacheco.
Fiel al ofrecimiento ratificado hace dos años durante la juramentación de la Juveco, Luque Pacheco indicó que desde el primer momento buscaron incidir como prioridad uno en la seguridad ciudadana. Fue así que se implementó el servicio de las tranqueras hasta las veredas, porque hasta los taxistas y motos lineales entraban por ellas; "la zona era terrible en cuanto a la delincuencia y asaltos", recuerda.
De igual modo, con los ingresos que obtienen por alquiler de la plataforma deportiva, instalaron desde hace dos meses siete cámaras de última generación en diversos puntos, "que no las tiene ninguna urbanización en Piura". No obstante, el proyecto comprende 16 cámaras, por lo que se aspira a completar este número.
Además de esto, dijo, mediante gestión con el Gobierno Regional, se cuenta desde setiembre del año pasado con el servicio de nueve alarmas vecinales. Mientras la Juveco contribuyó con el pago del cableado, el organismo regional aportó con la mano de obra y las alarmas.
Tranqueras
No obstante, la dirigente reconoce que las cosas no han sido fáciles, porque con la instalación de las tranqueras, desde un comienzo se tuvo problemas con el Secom, obteniéndose un permiso temporal hasta que les pongan una caseta permanente de vigilancia.
Asegura que las tranqueras contribuyen mucho a dar seguridad, tan es así que el informe de los vigilantes particulares indican que desde su instalación el 90 por ciento de la delincuencia disminuyó. Las mismas funcionan desde las 6 p.m. hasta las 6 de la mañana del día siguiente.
Reconoce asimismo que "mientras no nos pongan una seguridad permanente no podemos levantar las tranqueras porque la delincuencia está al acecho; ahora que saben que hay cámaras de vigilancia lo van a pensar, porque la gente está harta de que los estén asaltando en la puerta de su casa".
Cámaras
Pero además, decidieron implementar y apoyar este trabajo con las cámaras de vigilancia, las cuales han permitido detectar incluso reglajes a negocios. La central se halla camuflada en un sitio que normalmente nadie sabe, donde se monitorea las cámaras y se ve todo.
Lamentó que hace algunos días se registraron cuatro a cinco asaltos en la zona, a raíz de las obras de drenaje pluvial de la Av. Vice que se han venido haciendo, lo que motivó que las tranqueras queden abiertas. "Por esto, han vaciado una casa y asaltaron a mano armada a un muchacho en la esquina de "El Encuentro".
Sin embargo, espera que una vez se cuente con las 16 cámaras la seguridad, será mayor el control y se tendrá un apoyo mayor para la Policía Nacional "porque se podrá presentar una denuncia y se tendrá un amparo con las imágenes".
Alarmas
En cuanto a las alarmas, considera que faltan unas cinco más; la ventaja es que la gente puede adquirir el interruptor y se activan en la misma frecuencia del vecino que la adquiere; al activarse una están todos atentos porque cada alarma es independiente con su frecuencia respectiva.
Finalmente, la dirigente se mostró satisfecha de la labor hecha por la Juveco, al reconocer que ha sido una labor fuerte e incesante. "He tenido bastante apoyo porque casi todo ha sido gestión; he sido bien recibida donde he ido y han salido los proyectos importantes que ya están para ejecutarse, y le queda a la siguiente directiva fiscalizar las obras y espero que los vecinos colaboren", concluyó.
Datos
- Por el acceso que da a Maxi Bodega se carece de tranquera para el paso de vehículos, a la vez que sirve a los vigilantes para controlar a los vehículos que entran y salen en la residencial.
- Hasta hace un año atrás, antes de instalar tranqueras, San Felipe, Angamos y Santa Isabel eran foco de asaltos, principalmente a universitarios.
