ERP. La torpeza del regidor Miguel Cueva Celi, presidente de la comisión de Transportes de la Municipalidad de Piura, ha creado una reacción inusitada entre todos los conductores de motos lineales, quienes se oponen a aceptar una ordenanza aprobada, mediante la cual se les obliga a usar un tipo de casco.
Al mismo estilo de otros lugares que tienen conflictos sociales, cientos de motociclistas de Piura exigen la derogación de la ordenanza que prohíbe el uso de cascos cerrados; medida que ha sido incluso respaldada por el propio alcalde, quien se ve sobrepasado por las acciones individuales de los regidores de su variopinta agrupación.
En la movilización, los quejosos llegaron a reunirse con el gerente municipal Luis Patricio, donde la regidora Ingrid Wiesse dijo que la ordenanza no se va a aplicar, aunque no se sabe con certeza cual será el futuro de la ordenanza que establece el uso de los cascos cerrados.
En tanto, los motociclistas presentarán una acción de amparo, contra la Ordenanza, la cual incluso habría sido modificada por el propio alcalde, al redactarse un texto que no corresponde con la decisión del Concejo Municipal.
La movilización comprendió diversos sectores de Piura, lo que conllevó a la Policía a extremar las medidas de seguridad; en tanto, varios accidentes por la convulsión dejó a un periodista afectado por el uso de bombas lacrimógenas.
Los motociclistas en Piura, prestan servicio público, para lo cual no se encuentran autorizados. La Municipalidad, a través del regidor Cueva no ha previsto radicalizar el control para evitar este tipo de servicios; al contrario, con total impertinencia, se inclinó por el uso de cascos, que no son adecuados para una zona calurosa como lo es Piura.
Se estima unos 2 mil motocliclistas que prestan servicio pùblico en Piura.
