ERP. Con ocasión de la celebración de la Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, dogma de fe que la Iglesia celebra con alegría, donde se nos revela que, por la gracia de Dios, la Virgen María fue preservada del pecado desde el momento de su concepción; como ya es tradicional, las parroquias y colegios de Tumbes, Talara, Sullana, Paita, Piura y bajo Piura, se vieron repletas de miles de niños quienes vestidos completamente de blanco y guiados de la mano maternal de la Santísima Virgen, concebida sin pecado original, tuvieron su primer encuentro con el misterio de amor del Cuerpo y Sangre de Cristo, quien es el Amigo que nunca falla y el que único que abre siempre el corazón a todo lo verdadero hermoso y noble que hay en la vida.
El Arzobispo Metropolitano, Monseñor José Antonio Eguren Anselmi S.C.V., presidió en la Basílica Catedral de nuestra Ciudad, la Santa Misa en la que cientos de pequeños, acompañados de sus padres, padrinos y catequistas, en medio de un clima de profundo recogimiento y devoción, tuvieron su primer encuentro con Jesús Eucaristía y manifestaron su ardiente deseo de iniciar, con toda ilusión, una vida de profunda amistad con Él.
Dirigiéndose a ellos les dijo: “En este día tan grande y feliz, en que Dios viene por primera vez a visitar sus corazones puros de niños buenos, imploro para ustedes todas las gracias celestiales, y la bendición y protección de María Santísima, para que los conserve siempre buenos y santos. Nunca se olviden que Jesús es el más grande y bueno de todos los amigos que podemos tener. Por amor a nosotros, Él murió en la Cruz, y gracias a que resucitó, es capaz de llenar nuestras vidas de felicidad eterna como nada ni nadie puede hacerlo. Por eso les pido que crezcan aún más en la amistad con Él por medio de la oración, la catequesis, la devoción a la Virgen Santísima, que es nuestra Madre del Cielo, la confesión frecuente y recibiendo cada domingo a Jesús en la Hostia Santa donde está realmente presente. Hoy reciben a Jesús dentro de su corazón. Nunca se olviden que la amistad con Jesús nos abre a todo lo verdadero, bello y hermoso que hay en la vida. Que la Virgen Inmaculada los cuide junto con sus familias, y los lleve siempre de la mano al encuentro con Jesús, sobre todo en la Eucaristía. Los bendigo de corazón y les pido que también recen por mí".
Es importante resaltar que, la Primera Comunión forma parte de los tres sacramentos llamados de la iniciación cristiana: Bautismo, Confirmación y Eucaristía. En este día se celebra el primer momento en que una persona participa del sacramento de la Eucaristía, es decir, recibe el Cuerpo y Sangre de Jesucristo.
La Primera Comunión es un momento muy especial y enormemente deseado pues se recibe en el corazón por primera vez a Dios, para ello hay que estar bautizado, y preparado para este sacramento tras haber recibido un curso de catequesis en el que, junto con sus padres, los niños aprenden las verdades fundamentales de la fe católica, las leyes de Dios y de la Iglesia, las oraciones básicas del creyente y el significado de los sacramentos, para así poder recibir el cuerpo del Señor con fe y devoción. El curso de catequesis dura normalmente dos años, y una vez finalizada su preparación, y antes de recibir la Primera Comunión, el niño participa del sacramento de la Penitencia.
