ERP. Día a día, gran cantidad de familias continúan sufriendo los estragos provocados por la pandemia en nuestro país, muchos han sufrido la muerte de sus familiares, han perdido sus trabajos y fuentes de ingresos, a ello se suma la actual crisis política y económica que vive el país, y en el caso de nuestra región, las consecuencias del último sismo que ha dejado un gran número de familias afectadas; frente a ello las expresiones religiosas se han convertido en un gran aliciente.
Pero a pesar de los problemas y las adversidades, los peruanos, y en especial los piuranos y tumbesinos, no nos hemos dejado robar la esperanza ni la alegría de vivir, por lo que a las innumerables muestras de caridad y solidaridad para con quien más lo necesita, se han sumado un sin número de campañas de oración para pedir a Dios por nuestros hermanos afectados y sus necesidades.
Un ejemplo de ello es el caso de la Oficina Arquidiocesana de Catequesis, que ha convocado a los jóvenes coordinadores del programa de catequesis y a los líderes juveniles de las diferentes Parroquias de Piura, Sullana, Paita, Talara, Tumbes y Bajo Piura, para unirse de forma virtual en intensas jornadas de Adoración al Santísimo Sacramento, con el fin de pedir a Dios Padre por el eterno descanso de los fallecidos a causa de la Pandemia, por la pronta recuperación de los enfermos de Covid-19 y de los heridos del sismo, así como para que el Señor nos ayude a preservar nuestra frágil democracia, y con ella la libertad, la justicia, la unidad y la paz en el Perú.
Asimismo, los jóvenes también están rezando el Santo Rosario a María Santísima, nuestra Madre, rogándole que cubra con su manto maternal a nuestra Patria, y con su intercesión la libre de todo peligro presente y futuro.
El rezo del Santo Rosario, un arma poderosa.
El Arzobispo Metropolitano, Monseñor José Antonio Eguren Anselmi S.C.V., nos recuerda siempre que: “El Rosario es fuente de muchas cosas buenas en nuestra vida. Cuando rezamos el Rosario siempre florece la alegría y la esperanza, aún en medio del dolor y el sufrimiento. Es un arma espiritual poderosa para atraer de Dios, por la eficaz intercesión de la Santísima Virgen María, las gracias y bendiciones que necesitamos. Ahora, en estos momentos difíciles causados por la pandemia, momentos de sufrimiento para miles de personas y familias, se hace cada vez más necesario coger en nuestras manos con confianza el Rosario y rezarlo para atraer la gracia divina y el don de la salud para nuestros enfermos, y para que esta dura prueba acabe lo más pronto posible. Recemos diariamente el Santo Rosario para que nuestra Madre Santísima, quien es para nosotros Nuestra Señora de las Mercedes, nuestra amada Mechita, nos cuide y guíe en esta hora difícil para la humanidad, para el Perú y particularmente para Piura y Tumbes”.
Por su parte, Zaida Ramos Mena, Responsable de la Oficina Arquidiocesana de Catequesis, nos comenta que: “Aún en tiempos difíciles y complicados, Dios nos invita a ser personas de fe y constructores de esperanza. Es por ello que como jóvenes hemos querido unirnos en una intensa vida de oración a través del rezo del Santo Rosario y Exposición Eucarística. Pese a las limitaciones, la virtualidad fue nuestro medio para reencontrarnos. Son muchos los catequistas, coordinadores y agentes pastorales que ya no están con nosotros pero que nos han dejado un legado en la evangelización, y su testimonio de vida ha renovado nuestra esperanza en Cristo Resucitado y nos anima a seguir con nuestra labor como catequistas”.
