ERP. El presidente de la República Pedro Castillo Terrones, utilizando la plaza pública, increpó a sus detractores por acusarlo y no mostrar ninguna prueba. El mandarario es investigado por el Ministerio Público; por acusaciones de Karelim López, Zamir Villaverde y ahora por las declaraciones del exministro Mariano Gonzáles; sin embargo, nada es indubitable y todo hace indicar que es una estrategia para sacarlo del cargo.
Castillo en su visita al departamento de La Libertad, brindó un discurso haciendo alusión a las investigaciones que tiene en su contra, el cual señaló que en un año de gestión que lleva frente al palacio, sus detractores no han encontrado ni una sola prueba en su contra.
“Un año de gestión en este gobierno y los detractores hasta este momento los detractores no han podido encontrar ni una sola prueba que me incrimine, porque su misión, su perfil como políticos es otra” expresó en el lugar que más domina, que es la plaza pública, considerando las serias limitaciones que tiene para dar entrevistas a medios de comunicación y periodistas incisivos.
Asimismo, se manifestó que él está en el gobierno por la voluntad del país y, que ya es momento que las demandas de muchas regiones tienen que ser escuchadas.
"Nosotros estamos acá por la voluntad de este país. Hoy ha llegado el momento de hacer que las regiones tiene que ser escuchadas, que sus demandas tienen que ser atendidas, no porque el gobierno las tenga que atender si no porque es un derecho constitucional de los pueblos. Ese es el país que hemos recibido y que se muestran en carteles pidiendo agua, trabajo y sobre todo transparencia”, señaló en su discurso.
Otra investigación en Ministerio Público
La fiscal de la Nación, Patricia Benavides, dispuso que se inicien las diligencias contra el jefe del Estado por el presunto delito de encubrimiento personal. En este caso, por la sorpresiva remoción esta semana del ministro del Interior, Mariano González, después de que este oficializó la conformación de un equipo especial de la Policía Nacional para prestar apoyo a la fiscalía en el encargo de, entre otras tareas y, ubicar y capturar a personas del entorno del mandatario que se encuentran prófugas de la justicia.
Frente a estas declaraciones, el Congreso de la República convocó a la Junta de Portavoces, la Comisión de Fiscalización citó a Mariano Gonzáles, al nuevo ministro del Interior y al Premier de la República, donde se evidenció que lo único que existe contra el mandatario peruano, son dichos y subjetividades. Frente a ello, el mandatario sigue aferrado a frases como que nadie le encontrará nada.
