ERP. Increíble pero cierto, la lista liderada por el octogenario César Trelles Lara (83) se impuso en las elecciones realizadas por el Partido Aprista para elegir a sus nuevas autoridades, según informó la prensa local. Trelles, quien sufrió un accidente cuando concurría a participar en las exequias de Alan García Pérez, fue diputado por 3 veces y 2 presidente del Gobierno Regional de Piura.
Tras la votación, cuestionada por un sector de los militantes, Trelles Lara será el nuevo presidente de la referida agrupación política. Llama la atención, considerando que más allá de la edad del elegido, tiene poca formación política e ideológica. Incluso en la parte final como responsable del Gobierno Regional de Piura en el 2010, quedó totalmente vapuleado en su candidatura y además, su propia administración se vio envuelta en diversos problemas de corrupción.
Cesar Trelles Lara gana las elecciones en el partido aprista peruano
Trelles, eestará acompañado por el excongresista Elías Rodríguez como secretario general institucional. De igual forma, figuran Benigno Chirinos como secretario general político y el exlegislador Mauricio Mulder como titular de la comisión política.
La lista de Trelles compitió con la encabezada por Carlos Roca un destacado militante del partido fundado por Víctor Raúl Haya de la Torre, quien tenía en su equipo al exsecretario personal del expresidente Alan García, Ricardo Pinedo, uno de los defensores más recalcitrantes del fallecido presidente.
El octogenario fue duramente cuestionado por sus propios compañeros de la región Piura, sobre todo por su interés de no ceder los cargos públicos a nuevas generaciones. Incluso en la última oportunidad postuló para gobernador regional obteniendo un magro resultado. Quienes lo conocen saben de sus limitadas condiciones ideológicas y doctrinarias y sobre todo expositvas.
Plenario eligió a octogenario como su presidente
Tras el desarrollo de las elecciones internas, el gran partido de la confraternidad y disciplina compañeros, terminó en batalla campal y recriminaciones por tan desatinada idea de designar a un octogenario para dirigir el Apra.
