ERP. La delincuencia viene ganando la batalla a la Policía Nacional del Perú y otras autoridades competentes en materia de seguridad ciudadana en la provincia de Sullana. Durante toda la semana, se han dado cuenta de los actos criminales de sicarios, que con toda impunidad actúan en esta localidad, dejando heridos en unos casos o quitándoles la vida a otros, como sucedió este domingo.
Se podría decir, que el actual alcalde Power Saldaña Sánchez, ha sido un irresponsable total, al no implementar las estrategias necesarias para combatir a los delincuentes, que se aprovechan del nivel de desgobierno y pésimo estado de la ciudad para cometer sus crimines. El problema no es solo en la ciudad de Sullana, sino se repite con igual criminalidad en el distrito de Bellavista.
Hemos llamado la atención de este hecho, transmitiendo desde el lugar de los hechos, hemos solicitado información a la Policía Nacional del Perú y otros miembros del Comité Provincial de Seguridad Ciudadana, pero estas autoridades solo saben de la palabra fácil, pero no de las acciones concretas, en tanto, se extreman en hacer ofrecimientos que no cumplen, las personas siguen muriendo en esta calamitosa ciudad.
El alcalde indicó que solicitará al Poder Ejecutivo que la provincia de Sullana sea declarada en emergencia por los temas de seguridad ciudadana; sin embargo, los repetidos viajes a la ciudad de Lima, parece no han tenido el resultado esperado. Lo cierto que este tipo de irresponsabilidades, implica en sentido contrario muchas más muertes por acción de la violencia homicida.
Este último domingo, retornó con toda su fuerza y los asesinos le quitaron la vida a un empresario dedicado a la construcción de estructuras metálicas en el Ecuador y sobre todo en la provincia de Sullana. Se presume que el acto se encuentra vinculado a la extorsión de estos criminales, que no admiten una negativa. Lo cierto, que los responsables de encontrar a los asesinos y sobre todo develar la verdad, es la Policía Nacional del Perú.
La Policía Nacional del Perú, requiere para su trabajo contar con elementos que le provean información y sobre todo, videocámaras que faciliten la identificación de los asesinos. Creemos que la impunidad de estos hechos, viene normalizando la repetición de otros casos, porque los delincuentes saben que no les pasará nada. Pese a todos los crímenes ocurridos en esta subregión, el develamiento de los casos es mínimo en relación a lo sucedido.
Hacemos un llamado a las instituciones competentes, a la sociedad civil, para realizar acciones que devuelvan a esta provincia, paz y seguridad. Para ello, tiene que darse una lucha tenaz contra los delincuentes y hacer todo lo posible para identificarlos y capturarlos y aplicarles todo el peso de la Ley. No se puede ser indolente a la desgracia y permisivos al sicariato. Se debe actuar.
Es hora de entender que el sicariato es un peligro para la sociedad, que toda muerte de esta manera, atenta contra los elementales derechos humanos y que todo acto delincuencial, quita posibilidades para un desarrollo armónico de la provincia. Asumir con responsabilidad es una obligación, esperamos que esta muerte sirva por lo menos, para despertar a las autoridades y procedan a actuar.
