ERP. La crítica situación que se enfrenta Sullana en el saneamiento, aún no tiene cuando solucionarse. Conforme dimos a conocer en ediciones anteriores, existe un compromiso de las autoridades de la EPS Grau para terminar cuanto antes, los trabajados de cambio de las redes del colector Sullana y del colector San Lorenzo, aún no se avanza en la medida que los sullaneros esperan.
En un recorrido de este medio, se pudo comprobar que el sector de Santa Teresita es uno de los perjudicados. Familias de la calle Amotape, 26 de Abril, avenida Buenos Aires, comerciantes de la calle Ignacio Merino con transversal Junín y La Quebrada, tienen que convivir entre las aguas servidas y la falta del líquido elemento para sus elementales necesidades. Por estas calles, los trabajos se realizan con el mínimo de protección.
“El servicio por parte de la EPS Grau es totalmente pésima porque no hay seguridad en el tema de los desagües, las obras que se están realizando están quedando mal, no hay una supervisión y la población está muy disgustada con este tema”, opinó el subprefecto de la provincia de Sullana, José Ojeda Izaguirre.
Si las autoridades expresan su disconformidad, los vecinos de la calle Amotape indican que los avances se realizan de cualquier manera y más aún en la parte donde se viene cambiando la tubería, la empresa no ha asignado un supervisor que garantiza la calidad de las obras en proceso.
Según indicaron los desagües se han convertido en el dolor de cabeza para estas familias; incluso la parte posterior de las viviendas son afectadas debido a los atoros. Un ama de casa, narra la triste historia que enfrenta con la empresa EPS Grau. Los olores se perciben en toda la vivienda, les es imposible dormir y los atoros los obligan a reaccionar para evitar que inunden la vivienda. Es lo que narró la propietaria de la vivienda N° 216 de calle Amotape.
No es el único sector perjudicado por el saneamiento; en la calle Félix Jaramillo hasta la Transversal Las Lomas, el tema no es diferente a lo visto en la calle Amotape. Incluso, parte de lo que viven los moradores de esta vía, se genera en las dos calles mencionadas. Además de ello, los vecinos piden que se amplíe lo que se viene haciendo y no se trabaje solo en una parte, porque no resolverá nada.
Estos desagües han colapsado después de las pequeñas lluvias que se presentaron en el mes de marzo del 2017 y que hasta el momento no se han solucionado. Incluso indicaron que existe una dejadez no solo de la EPS Grau, sino igualmente de la Municipalidad Provincial de Sullana.
Hace 4 años, la gestión de Jorge Camino Calle salió entre lodazales, aguas servidas y excremento; 4 años después la situación no es diferente, el riesgo sigue siendo el mismo y las aguas putrefactas que se almacenan en algunos lugares, son un riesgo para la salud de las personas.
En la calle Ignacio Merino, está trabajando un cargador frontal con operarios que no cuentan con los implementos de seguridad y sin supervisión. Los trabajos, asimismo, carecen de señalización y los locales ubicados a inmediaciones de la obra trabajan bajo amenaza de desplomarse en cualquier momento por la presencia de enormes zanjas que durante las noches se empozan con agua y empiezan a minar el terreno.
Se buscó tener información precisa sobre el particular del jefe zonal de la EPS Grau, Kanty Flores, pero se nos dijo que estaba en reunión. Se conoció que ayer el funcionario tampoco acudió a la reunión del Comité de Seguridad Ciudadana para exponer sobre las obras ante las autoridades.
Estamos próximos a culminar el gobierno edil y lo que sí es común entre el alcalde que se va y el que reemplazó, es su ineficiencia para resolver este tipo de problemas, que desdicen mucho de la ineficiencia de la EPS Grau y de la Municipalidad de Sullana.
