ERP. Por Miguel Arturo Seminario Ojeda. Cuando comencé a investigar sobre el pasado sullanero, hace más de 30 años, había leído la Monografía de Sullana, publicada por don Pablo Cruz Arrunátegui en 1958, y algunos artículos sueltos en diferentes diarios de la localidad, todo eso me provocaba un dulce sabor en la memoria, saber algo sobre Sullana, fue quizá el mejor regalo que recibí en la primera década de mi vida.
Después vendría la lectura de las páginas publicadas en el diario “Correo” de Piura, por don Reynaldo Moya Espinoza, y luego los manuscritos e impresos que existen en diferentes bibliotecas y archivos de Piura, Lima, Trujillo y Sullana, con lo que di cuerpo al primer tomo de la Historia de Sullana, en 1986, edición que comprometió la buena voluntad de don Fernando Bel Hougthon y de Marcela Ruiz Carnero.
Años después, en el 2014, un libro, hecho con gran amor por Sullana, vino a llenar muchos vacíos, es el libro publicado ese año por Manuel Rodríguez-Paiva Borrero, antropólogo sullanero, con una fuerte inclinación hacia la Historia, y dueño de una voluntad muy grande, por dar luz al pasado sullanero, que con trabajos como el comentado, es conocido con mayor amplitud.
Tan valioso es ese libro en la “Cronología diferente” que presenta, que bien merece ser vuelto a reeditar, no mil, sino varios miles de ejemplares, y distribuirlos en todas las instituciones educativas de la provincia, y no solo en la ciudad de Sullana. Es un ejemplar cargado de información sobre el pasado de nuestra provincia, que no limita la información al perímetro urbano de la ciudad de Sullana, sino, que presenta un retrato de los acontecimientos históricos y cotidianos, de una Sullana que ya no existe.
Es tarea de la Municipalidad Provincial o de la UGEL correspondiente, lograr una nueva edición del libro, y repartirlo al comienzo del año escolar, por lo menos a los estudiantes del quinto de primaria y quinto de secundaria, para que conozcan las raíces del espacio geográfico en el que nacieron, y que no se hallen huérfanos sin conocimiento del pasado que les pertenece.
Por la lectura de este libro de Manuel Rodríguez-Paiva Borrero, no solo he conocido en detalle, hechos asociados a la localidad, hay varios de trascendencia regional y nacional, que fortalecen ese orgullo de llamarnos sullaneros; así también hemos visto, que ya en los comienzos y mediados del siglo XX, hubo quienes se interesaron por el rescate del pasado sullanero, porque sabían que ese pretérito es grande.
Más allá de tomar como referencias, solamente a las publicaciones de Luis Humberto Delgado Coloma, de Pablo Cruz Arrunátegui, de Reynaldo Moya, y de quien escribe estas líneas, Rodríguez-Paiva Borrero, en su paciente consulta en el archivo municipal de Sullana, al lado de la cronología sustanciosa en datos, nos presenta una relación de esfuerzos de quienes quisieron entregar a los sullaneros, páginas de su historia.
Así podemos leer y enterarnos que en 1937, don Ricardo Vegas García, publicó su libro “Apuntes para la Historia de Piura”, costeada por las municipalidades de Piura y Paita, dedicando a Sullana, una parte del contenido, esta publicación fue muy cercana a las bodas de plata provinciales, por cuyo motivo, el año anterior se publicó “El Terruño, Historia de Sullana” de Luis Humberto Delgado Coloma.
También nos enteramos de la “Monografía de la Provincia de Sullana”, hecha por don Arturo Martínez Olaechea, para cuya publicación se solicitó apoyo al Concejo provincial de Sullana, pero al parecer, el municipio no lo tomó en cuenta, perdiéndose esa oportunidad de contar con una valiosa fuente de información para trabajos futuros.
En 1942, José María Calle, publicó su trabajo “Monografía de la provincia de Sullana” que había sido premiada en el concurso que se hizo a nivel provincial, con ocasión de las fiestas patrias, y que también fue reproducida en un diario de circulación regional. Pocos años después, en 1949, Luis Carnero Checa, el hombre de letras y del mundo jurídico, cuyo centenario de nacimiento es este 2018, publicó un número especial, dedicado a la provincia de Sullana.
Como dije líneas arriba, la lectura de “Sullana 1879-1961”, tan rica en su contenido por la diversidad de datos que nos entrega, debe ser de lectura recomendada, para todos los sullaneros, que quieran conocer lo sucedido en el periodo que se enmarca la publicación. Esperemos que este entusiasmo del autor no decaiga nunca, y continúe por este camino de la investigación, que requiere de un conjunto de hombres y mujeres que se entreguen a la investigación del pasado sullanero.
