ERP. Cuatro mujeres de nacionalidad venezolana fueron denunciadas en la comisaría del distrito de La Brea-Negritos, de haber robado un aproximado de 3,000 soles en mercadería de la bodega de una próspera comerciante, quien les brindó junto a sus vecinos ayuda a su llegada a nuestro país y alquiló habitación, estando a la espera que las autoridades policiales las ubique e intervenga para que sean sancionadas de acuerdo a ley.
La comerciante X.T.P.CH (38) denunció en la comisaría del distrito de La Brea-Negritos haber sido víctima del robo de mercadería de su bodega por un monto aproximado de 3,000 soles, por parte de las venezolanas Yoglennys Arévalo, Minorka Salazar y las hermanas Yelika y Yakcelis Castro, a quienes a su arribo al país y distrito talareño les brindó el apoyo respectivo hasta que consiguieran un trabajo.
La denunciante señaló que con el transcurrir de los meses la amabilidad y cordialidad que les caracterizaba a las jóvenes extranjeras se convirtió en descortesía y groserías, hasta el punto que luego de conseguir trabajo en un conocido bar de Talara y alquilar una habitación, comenzaron a frecuentarlas hombres de dudosa procedencia, quienes en modernas unidades escuchaban música con alto volumen y consumían alcohol y algunas ocasionas drogas, sin tener consideración alguna de los vecinos, generando además un ambiente conflictivo en la zona de la calles Cajamarca y San Cristobal del distrito negriteño.
Sin embargo lo peor estaba por ocurrir, ya que la próspera comerciante al abrir su bodega, se dio con la sorpresa que la mayor parte de su mercadería, valorizada en un aproximado de 3,000 soles, había sido sustraída por las extranjeras, quienes huyeron del distrito hacia las provincias de Sullana y Piura, denunciando el robo en la comisaría del distrito para las investigaciones correspondientes.
“Al igual que un grupo de vecinos yo les brinde la ayuda respectiva a estas cuatro venezolanas quienes en un inicio eran amables pero luego se volvieron groseras e irrespetuosas, alquilaron un cuarto y ahí llegaban hombres al parecer colombianos y de dudosa procedencia, escuchaban música a alto volumen, bebían licor y consumían drogas, generándose varias grescas con los vecinos quienes les pedían se vayan de la zona. Lo hicieron pero llevándose la mayor parte de la mercadería de mi bodega. Ahora estoy en la quiebra. Tengo conocimiento que trabajan en unos bares de Sullana y Piura, por lo que espero que la policía las intervenga para que paguen por lo que han hecho”, señaló la afectada.
