ERP. La Empresa Prestadora de Servicios de Saneamiento Grau S.A.; a través de su Zonal Piura anunció que, con el fin de implementar y renovar el servicio medido a sus usuarios empezó desde el 1 de agosto con la instalación de 3 mil 386 medidores en los distritos de Piura, Castilla y Veintiséis de Octubre.
El programa se ejecutará a lo largo de todo el mes de agosto hasta la primera quincena de setiembre y tiene como objetivo principal la instalación de medidores para reducir el desperdicio de agua a nivel domiciliario, es decir que las familias controlen su consumo y eviten el uso excesivo del líquido elemento y paguen lo justo.
La primera parte del programa se inició en los meses de abril y mayo con la instalación de 2 mil 400 medidores y se tiene previsto una tercera para finales del presente año, con lo cual se pretende superar la metas del Plan Maestro Optimizado de EPS GRAU S.A. del presente año.
La instalación de medidores es tanto para nuevas conexiones en las que por primera vez se instalará el instrumento de medición, que suman alrededor de 150, así como para aquellas conexiones en las que por el tiempo y el deteriodo es necesario reemplazarlo y son 3 mil 236 medidores.
OBLIGATORIEDAD DE LA INSTALACION DEL MEDIDOR
De acuerdo al Reglamento de Calidad de Servicios de Saneamiento, aprobado mediante Resolución de Consejo Directivo N° 11-2007-SUNASS-CD, del 02.02.2007, precisa que la instalación, cambio o reubicación del medidor es obligatoria para el usuario y no permitir la instalación del mismo conlleva aplicaciones de sanciones como el cierre de servicio hasta por 15 días.
En este sentido, la EPS Grau pide a la población valorar el recurso del agua potable, usarla sólo en lo necesario para garantizar así un abastecimiento futuro de calidad y una mayor cobertura en la redistribución del agua potable hacia los lugares donde existe actualmente restricciones en el servicio.
Para lo cual los usuarios domésticos deberán aprender hacer un mejor uso del servicio de agua potable y no desperdiciarla como se puede apreciar muchas veces, sobre todo en urbanizaciones o asentamientos humanos que riegan sus calles y fronteras de sus casas en tiempo de verano, y es que al no contar con un medidor que registre su verdadero consumo sólo pagan el asignado.
