ERP. La periodista peruana Juliana Oxenford, una de las más objetivas e independientes de la señal abierta de la televisión, se despidió de ATV donde laboraba con el rigor periodístico que aprendió de su maestro César Hildebrandt y que mejoró con sus años de trabajo asiduo en programas noticiosos. Su salida, se presume que tienen que ver con condicionamientos del “poder”.
En un país que cada día se parece más a Guatemala, Venezuela y Nicaragua, programas independientes que digan la verdad y no se sumen a campañas mediáticas interesadas; el programa de la periodista Oxenford, son indispensables y necesarios; pero, en una clara demostración de los retornos a la década de los 90, al igual que su “maestro” ya no estará en señal abierta.
En su último programa, sus palabras finales no fueron de rencor, solo describió las razones y motivos que la obligan a retirarse y para catapultar y cerrar esta etapa de su vida, entrevistó a uno de los mejores periodistas del país César Hildebrandt, que con mucha prolijidad calificó de “banda” al Congreso de la República, el cual precisó que buscan convertirse en una “autocracia”.
Juliana Oxenford, refirió con sorna a sus principales antagonistas que fueron motivo de sus diversos informes; Dina Boluarte la que no gobierna y que tiene como el gran negociados a Alberto Otárola; la conducta aviesa de un condenado por corrupción como es Vladimir Cerrón, quien con desvergüenza se ha alineado con el fujimorismo.
“Como es que este gobierno (Otárola corta el jamón) permite que otro poder del Estado haga y deshaga (…)” precisó la periodista en su entrevista con Hildebrandt quien describió de la manera más diáfana de lo que sucede con los poderes del Estado, sobre todo el Congreso que buscarían no ir a la cárcel y en el caso del Ejecutivo, no tiene metas, y lo único que les interesa es quedarse.
Aunque no ha quedado claro, lo que si es indudable es que el rating de Oxenford justificaba su continuidad; pero repitiendo las viejas usanzas de gobiernos anteriores; se estaría sacrificando a esta profesional, con la finalidad de conceder hacia los grupos de poder que les interesa tener a toda la televisión de señal abierta, inclinada y reverente a silencios cómplices y mentiras que pretenden hacerse de verdad.
"Gracias por tanto. Nos volveremos a ver en algún lugar donde la verdad no tenga precio y donde el periodismo siga siendo el instrumento para incomodar a los poderosos. Allí donde la libertad siga siendo mi vehículo y donde me quieran sin guiones. Los abrazo fuerte, siempre" indicó muy serena y tranquila la versatil periodista peruana.
