ERP/C.Chávez. Cada 24 horas se registra un hecho de sangre en la provincia de Sullana. El sangriento asesinato a manos de asesinos a sueldo del mototaxista Anderson Snaider Castillo Espinoza (24), cuando iba a tomar una carrera la noche del domingo 26 de marzo, conmocionó a los citadinos y como si se tratara de una pesadilla el lunes 27 de marzo, un obrero fue interceptado por sujetos, quienes sin piedad le dispararon en el pecho, dejándolo gravemente herido para posteriormente escapar sin rumbo conocido.
Según las primeras investigaciones el obrero identificado como José Fernando Imán Fasanando (21) se encontraba conversando con unos amigos en la avenida Circunvalación con calle José María Raygada cuadra 5 en el asentamiento Humano 9 de Octubre, cuando una motocicleta con dos sujetos a bordo se estaciona frente al grupo, uno de ellos desciende disparándole sin piedad dejándolo mal herido en el pavimento.
Sus amigos lo condujeron al Hospital de Apoyo II-2 de Sullana, donde fue atendido en el área de emergencia por el médico de turno, quien diagnosticó Trauma torácica y hemotórax derecho por proyectil arma de fuego.
Hasta el nosocomio chirense llegaron los familiares, mientras la policía investiga los hechos.
Sin embargo, las balas disparadas por sicarios siguen cegando vidas, nuestras autoridades competentes de seguridad ciudadana juegan a aprender sin darle la importancia debida.
¡No mas muertos! ¡No más heridos por ataques de sicarios! ¡No más extorsiones! Es el pedido de la población mientras la cobarde bala, el sicario a sueldo se pasea a vista y paciencia en una ciudad sin principio de autoridad, ni capacidad para hacerlo.
