Piura. En un ambiente de fiesta y gozo, más de 20 mil fieles católicos colmaron las tribunas y la cancha del Estadio Miguel Grau de nuestra ciudad para con gran alegría y entusiasmo participar del primer día del X Congreso Nacional Eucarístico y Mariano Piura 2015.
Desde las tres de la tarde, hora en que se abrieron las puertas de ingreso al Coloso Miraflorino, cientos de miles de personas llegadas de todas las zonas de nuestra Región y también desde los rincones más alejados de nuestra patria, comenzaron a llenar las tribunas de manera ordenada y tranquila, delegaciones de hermanos nuestros en la fe venidos desde Ayacucho, Puno, Cuzco, Arequipa y Jaén se unieron a católicos de Trujillo, Chiclayo, Lima y Tumbes, costa, sierra y selva peruanas se unieron en nuestra cálida ciudad de Piura para festejar a Jesús Eucaristía.
Con cantos y oraciones los fieles católicos esperaron el inicio de este X Congreso Nacional que ofreció su primer día “Por la Educación Católica”, generando un ambiente de verdadera fiesta de la fe y fraternidad entre los presentes, hermandades, cofradías, grupos de laicos, delegaciones de universidades, colegios, instituciones, familias, grupos parroquiales y miles de fieles católicos se reunieron bajo el lema “El Señor Jesús es el Pan vivo que da la vida al mundo”
A las 05:30 p.m. ingresó al campo eucarístico el Eminentísimo Señor Cardenal Raúl Eduardo Vela Chiriboga, Arzobispo Emérito de Quito y enviado especial del Papa Francisco, acompañado de Monseñor José Antonio Eguren, S. C. V., Arzobispo Metropolitano de Piura y los eminentísimos Señores Cardenales y Obispos que se han dado cita en nuestra ciudad para participar del X Congreso Nacional, en medio de una gran ovación de las miles de personas congregadas en el recinto deportivo miraflorino, que a su paso lo saludaban con fuertes palmas.
Luego de dirigir un especial saludo a todos los fieles presentes y brindar el mensaje inaugural del X Congreso Nacional Eucarístico y Mariano, se dió lectura a la emotiva carta de nombramiento que envió nuestro Santo Padre el Papa Francisco al Cardenal Vera Chiriboga, en donde le nombra y envía como Enviado Especial suyo para que nos acompañe en su nombre durante este tiempo, inmediatamente después se anunció el ingreso del Señor Cautivo de Ayabaca, que llegaba en una imponente anda cargada y resguardada por cientos de miembros de su Hermandad. Por el ingreso a la tribuna norte del Estadio y a los vítores de ¡Viva el Señor Cautivo! , la imagen de esta especial devoción norteña asomó por la pista atlética causando la ovación y algarabía de las miles de personas congregadas que agitando sus pañuelos y gritos de júbilo lo veneraron y le daban una cordial bienvenida al “Milagroso Señor Cautivo”.
LA EUCARISTÍA Y MARIA: ESCUELA DE VIDA CRISTIANA
La catequesis del día estuvo a cargo del Rev. Monseñor Eduardo Chávez Sánchez, Cofundador del Instituto Superior de Estudios Guadalupanos y Canónigo de la Basílica de Guadalupe de México, con la ponencia “La Eucaristía y María: Escuela de Vida Cristiana”.
Monseñor Chávez exhortó a los presentes a recordar que “María es mujer eucarística por excelencia, ella sabe poner a Jesús en tu corazón, ella sabe tomar lo bueno y verdadero en el corazón humano, lo que ya dios ha plantado en tu corazón como semillas del verbo, ella sabe poner a Jesús en tu corazón, ella sabe tomar lo bueno y verdadero, llevándolo a la plenitud de Jesucristo nuestro Señor.”
“Ella nos guía a Jesús, el centro de su mensaje es Jesucristo nuestro Señor, el centro de su mensaje es Jesús cuando ella dice quiero una casita sagrada para ofrecer mi amor persona, ese su amor persona es Jesucristo, ella es el arca viviente de la alianza, Jesús es el arca, él es la eucaristía”, expresó Monseñor Chávez
Durante la Solemne Santa Misa presidida por el Eminentísimo Señor Cardenal, Raúl Eduardo Vera Chiriboga, Enviado Especial del Papa Francisco, su Eminencia dio gracias a Dios por el gran honor que el Santo Padre le concedió al designarlo como enviado especial suyo, lo que le ha permitido poder vivenciar la profunda fe del pueblo peruano y especialmente el fervor de los piuranos.
Al finalizar la ceremonia, se llevó a cabo la Adoración Eucarística de la Ostia Santa en medio de un ambiente de especial fervor y recogimiento.
Cortesía: Arzobispado de Piura.