ERP. La Ley de Bases de la Descentralización y la Ley de Gobiernos Regionales establecieron el marco legal para el funcionamiento para las regiones. Sin embargo, presidentes antes o gobernadores ahora, vivieron y viven en la nebulosa de no saber cuáles son sus competencias. Los proyectos de impacto regional son una ilusión, en tanto que pistas, veredas, agua y desague de ciudades forma parte de la agenda regional, cuando no les corresponde.
Mirar como el actual gobernador de Piura don Luis Neyra León, se ufana de poner la primera piedra de una obra municipal, es simplemente la muestra palpable que no sabe porque está como gobernador regional; sin embargo, más allá de su falta de entendimiento en estos asuntos, no es el único que entró en ese ovillo o esa madeja de entrometerse en asuntos que deben ser netamente municipales.
Refiriéndose a las regiones, el Lic. Hernán Carrasco, quien es un estudioso del tema precisa "En primer lugar cabe recordar, que el denominado proceso de integración regional proviene de un proceso trunco de integración macro regional que era el espíritu de la reforma del estado, en consecuencia tenemos gobiernos regionales sobre la base de los antiguos departamentos, posterior a ello en el segundo gobierno de Alan García,de dio por concluido el proceso de transferencia de competencias, recursos; sin embargo, ese proceso solo fue en el papel porque los denominados Gores carecían de capacidad de decisión, hasta el momento las decisiones económicas de las regiones recaen en el MEF y el ejecutivo,en segundo lugar; el objetivo del proceso era la descentralización económica, haciendo contrapeso al crecimiento macro cefálico de Lima" opina.
En efecto, desde Lima se ha descalificado a los funcionarios regionales, respecto a su incompetencia, corrupción y falta de capacidades para instituir un regiimen desconcentrado, Carrasco Carrasco agrega "Otro argumento sobre este proceso es que el Gobierno ejecutivo creo en los gobiernos regionales departamentales,oficinas de enlace, agencias y otras modalidades de presencia del ejecutivo en las regiones, restándole protagonismo a los Gores"
César Trelles Lara (2003-2010), el dos veces presidente regional
Si miramos la sucesión de los ejecutivos regionales, existen algunas diferencias a tener en cuenta; el primer presidente regional en la nueva etapa de funcionamiento de estos entes fue don César Trelles Lara, un longevo político con poco brillo, pero con un aparato que miraba más allá de las pistas y veredas de una ciudad. Aunque muchas obras fueron abandonadas, le dio énfasis a lo regionales y no se limitó a lo citadino.
Fue elegido en el 2002 y asumió su mandato en el 2003, tras un mandato de muchas expectativas, comenzaron a gestionar la explotación de los fosfatos de Bayóvar, y aunque fue duramente cuestionado por ello, se hizo realidad; puso esmero en lograr la ejecución del proyecto Alto Piura y poco a poco fueron realizando incidencia en el gobiero central para la asignación del presupuesto.
Fue reelegido en el 2006 y asumió nuevo mandato en el 2007 y gobernó hasta el 2010. Lamentablemente, su gobierno se deterioró demasiado y perdió legitimidad, pese a ello, la concepción de desarrollo iba más allá del espacio municipal, además de ello, no existían esos bodrios llamados Gores Ejecutivos y menos Gores Municipales; si, se realizaban coordinaciones entre niveles de gobierno.
Los gobiernos regionales fueron creados para descentralizar el país, en lo político, administrativo y económico; pero pese a los años transcurridos, se ha recentralizado la gestión pública y desde los sectores se manejan los recursos para los grandes proyectos, que son entregados a discrecionalidad y acorde al color y porque no sobonería de autoridades regionales.
El Lic. Hernán Carrasco, considera que "Posterior al primer gobierno regional de César Trelles Lara, del partido aprista peruano, lo han sucedido movimientos regionales desde hace cerca de quince años, movimientos que se constituyen en torno a un líder sin programas, planes de gobierno,que dejan de lado proyectos que dinamicen la economía regional, sin liderazgo político y que mantienen a la región en una situación de crecimiento inorgánico sin una perspectiva de largo plazo, a mi juicio debemos dar paso a gobiernos federativos,retomando la propuesta de un proceso de reforma del estado".
Adicionalmente a lo que indica el especialista, se debe considerar que los caudillos regionales, no tienen formación política, generalmente desconocen el territorio, con ello, sus potencialidades y brechas de integración, situación que tratan de remediar cuando acceden al cargo, perdiendo tiempo, para plantear propuestas de solución. Además de ello, con su escaso conocimiento de planificación, creen que la caracterización regional no existe y se embelesan con el documento que sintetiza lo ya trabajado anteriormente.
Javier Fernando Miguel Atkins Leggios (2011-2014) y las expectativas de renovación
Fue un político que llegó al gobierno regional con buenos augurios, su alta votación fue sinómimo de respaldo ciudadano y su alianza con grupos de izquierda, abrió la posibilidad de una mayor concertación en la región Piura, para planificar y ejecutar las obras de desarrollo que potencie e integre mucho más el espacio territorial. Para algunos de nuestros consultados, fue la última expresión de lo que realmente debe ser un gobierno regional.
Se puso énfasis a la continuidad de obras regionales, algunas abandonadas, es el caso de la vía al Kilómetro 21, que ahora permite la conectividad con Tambogrande; se continuó, aunque con el proyecto del Alto Piura que finalmente quedó truncado, se construyó el Hospital Las Mercedes de Paita y se incidió para hacer realidad los denominados hospitales estratégicos, pero inconclusos a la fecha. Atkins Lerggios puso en agenda temas importantes como la primera infancia, la desnutrición y la anemia a través del SIREPI, que posteriormente sirvió de base para la política nacional de primera infancia. Del mismo modo, se atrevió hablar del transporte ferroviario y la realización del tren del norte, que si bien no prosperó, era una iniciativa que va mucho más allá de lo meramente municipal.
Lamnetablemente, alejarse de sus aliados políticos y el burocratismo ganó a la gestión de Javier Atkins y lo que pudo ser un importante modelo de gestión, poco a poco se fue perdiendo y restando liderazgo a un caudillo que emergíó con los mejores pergaminos, que se diluyeron con el pasar del tiempo. Sin embargo, observando la obra de drenaje de la avenida Vice, algo diferente quedó para la ciudad.
Reynaldo Hilbck Guzmán (2015-2018), el gobernador municipal
Nació de las canteras del entorno de Javier Atkins Lerggios y pretendió ser alcalde, pero más pudo su expectativa por ser gobernador regional, antes presidente regional. Estuvo como presidente del Directorio del proyecto Alto Piura; sin embargo, su apellido está vinculado a don Francisco Hilbck de grata recordación en la provincia de Piura, esa estela le favoreció y salió triunfante en su postulación regional.
Su gestión regional, puede ser considerada entre mediocre y regular; la visión de una Piura integrada entre costa y sierra siegue siendo una rémora. Por ejemplo, las vías hacia Ayabaca o Huancabamba, son riesgosas, peligrosas y sin pavimentar; la vía Sullana-Paita que pese al alto tráfico, solo fue parchada tras un evento climático, y los hospitales estratégicos, yacen hasta ahora abandonados por incumplimiento de contratos.
Pero si se puede mencionar la Vía Costanera que pretende unir todo el litorial piurano, se consideró como obra de reconstrucción, aunque realmente no lo era, pero el enfoque para su construcción indica un planteamiento de desarrollo más cercano a lo regional. Lamentablemente Hilbck Guzmán, cayó en el facilismo de hacer reposar la gestión en personas de dudosa reputación y desvió lo que podría hacer sido mejor.
Quiso ser alcalde de Piura y talvez por ello, dio énfasis a grandes proyectos de conectividad entre el sector oeste de la ciudad. Aunque las vías se encuentran mal construidas y son lagunas ciegas cuando llueve, en épocas normales, son bastante útiles. Este tipo de obras, aunque importantes, no eran de competencia regiomal y ante la inexistencia de proyectos se prefirió invertir en lo local.
La gestión de Hilbck enfrentó el mayor desastre de los últimos años, la salida del río Piura en el año 2017 sus efectos devastadores con la inundación de Piura y el bajo Piura. A este hecho hay que añadirle la total pasividad con la que aceptó la creación de la Autoridad de Reconstrucción con Cambios, sucumbiendo a su propia autoridad en el territorio regional y dejando que una autoridad administrativa tenga mayor injerencia en la reconstrucción, .
Hilbck Guzmán, fue un fracaso electoral en procesos posteriores a su gestión. Creía haberlo hecho todo y saberlo todo, según una fuente interna que pretendió acompañar0o en su postulación.
Servando García Correa (2019-2022) y tiempo de crisis
El exgobernador regional natural de Lalaquiz, provincia de Huancabamba, ganó la elección tras varios intentos y pese a las males relaciones con su vicepresidente, le puso énfasis en la ejecución o en la gestión de proyextos importantes para la región, sin embargo, no contaba con un equipo técnico capacitado para tal fin. Lamentablemente, durante su mandato, la pandemoa afectó la dinámica regional y tuvo que centrarse en atender el asunto sanitario.
Después de dejadeces e ineficiencias, fue entendiendo el asunto regional, fue motivado a actuar en el caso de la pandemia por la presión de líderes regionales y trabajó intensamente para adquirir plantas de oxígeno y dinamizar con profesionales de la salud, medicinas y equipamiento de establecimientos de salud, que permita atender a la población regional; para ello contó con el apoyo del nivel central.
Aunque de repente no lo pensó, pero que es una realidad ahora, el nuevo hospital de Sullana, es una joya de ingeniería con buen equipamiento e infraestructura que bien podría ser un nosocomio de nivel 3.1; a este establecimiento se suma la optimización del antiguo hospital, cuyo cuerpo médico pide se mantenga con nivel II-2, para que bajo esa nueva situación gane la población con establecimientos de buen nivel.
Servando García realizó una gestión de regular a mediocre, acorde a la situación que se vivió y extendiendo sus acciones hacia la serranía; pero sin considerar proyectos emblemáticos como son las vías hacia Ayabaca o Huancabamba, el Hospital de Alta Complejidad de Piura, la vía doble carril hacia Sechura y que favorezca a todo el Bajo Piura, igualmente, proyecto similar que mejore la conectividad Sullana-Paita.
Luis Ernesto Neyra León (2023- ), perdido en sueños que considera realidades
En lo que va de la gestión, Neyra León, demuestra estar perdido en la nebulosa regional, pareciera que sigue aún en campaña. No tiene ideas y menos conoce lo que es planificación regional y menos entiende lo que es un gobierno regional. Se le ve cada cierto tiempo, viajando orondo a la ciudad de Lima con la finalidad de arrancarle a los sectores, algo de recursos públicos para proyectos específicos.
Es tan elemental en lo público, que incluso en sus alocuciones señala que es la “primera vez que existe un plan de desarrollo para Piura” desconociendo todos los esfuerzos que se ha hecho para planificar el desarrollo regional, muchas veces con el apoyo de importantes organismos de cooperación internacional, y claro, su elementalidad le impide conocer que la región Piura, tuvo un proceso de planeamiento al desarrollo, incluso desde antes de don Juan Calderón Detling y de Eduardo Mendoza Seminario.
Posteriormente, hemos conocido planes bien hechos, pero de escasa aplicación por la desarticulación entre planes y presupuesto, a causa de la debilidad del gobierno regional en la toma de decisiones en el territorio y la nula capacidad para la asignación de recursos sin depender del todopoderoso Ministerio de Economía y Finanzas.
Pero no solo es estas situaciones de miopía que lo llevan a perderse en lo que es un gobierno regional, no se le ha escuchado ni media palabra de lo que debe ser un nivel de gobierno que tiene como fundamento el espacio regional. Incluso, en las promociones de sus obras se muestra ufano en obras de carácter municipal. Es decir, para hacer ello, no tendría sentido elegir autoridades regionales.
Muestra una tímida gestión en el nivel central para retomar el proyecto Alto Piura, participa de manera muy sumisa y sin descollar en los Consejos de Estados Regionales, no se le escucha algún planteamiento de lo que debe ser la descentralización fiscal y no existe cambio en la conducta en lo visto en Reynaldo Hilbck, Servando García y César Trelles.
Las competencias y obras de impacto regional
El gobierno regional de Piura, debería precouparse en proyectos de alcance regional y no preocuparse en los asuntos municipales, para ello están los gobiernos regionales, en tal sentido y de una manera breve diremos, que existen prioridades a tener en cuenta y que no hacerlo simplemente es miopía; por ejemplo, no entender que el puerto de embarque es Paita y por lo tanto debe mejorarse la conectividad, sobre todo hacia Sullana, como bien lo dice el exvicegobernador Alfredo Neyra Alemán, "facilitar el acceso a las zonas de producción para llevarlos al mercado".
De igual manera, más que nunca debe ponerse ímpetu en la gestión para hacer realidad la vía hacia Ayabaca, a Huancabamba, unir con una doble vía Sullana- Paita; Piura Sechura; construir los puentes vehiculares en las principales quebradas de las provincias de Piura, Morropón, Ayabaca y Huancabamba; presionar para la continuidad del proyecto Alto Piura; destruir el puente Cáceres, para construir otro idóneo, promover la eficiencia energética a través de energías limpias y renovables, enfrentar de manera decidida la lucha contra la desnutrición infantil y sus efectos nefastos en los logros de aprendizaje, promover la investigación e innovación tecnológicas así como la lucha contra el cambio climático.
Siguiendo la misma línea, quienes conocen el territorio y su dinámica, deberían haberse dado cuenta de la alta densidad que existe hacia el Bajo Piura, donde se tiene una zona de identidad como Catacaos, y zonas productoras en todo el valle del Piura; sin embargo, sigue en las mismas condiciones y el gobierno regional, por muy innovador que crea ser su Gobernador, más sigue enfrascado en hacer pistas y veredas.
Defender competencias, no solo es supeditarse a los Consejo de Estados Regionales, donde solo se negocian proyectos y no se discuten competencias, es asumir un liderazgo regional para articular las actividades y proyectos que corresponden al ámbito regional, donde se requiere mirar de manera más profunda las brechas que esperan ser atendidas.
En conclusión
Se han dado pasos de ida y muchos de retroiceso, la regionalización busca la descentralización y no la desconcentración y la tan idílica posición de la autonomía política, económica y administrativa, sigue siendo un ideal; en tanto, los líderes regionales han demostrado más practicidad que otra cosa, pues les interesa más el dinero para proyectos específicos, que el ejerciciop de competencias efectivas. Se amenaza desaparecer los movimientos regionales, es la oportunidad para que despierten con una agenda difrente a ser furgones de cola del nivel central.
ERP/Andres Vera