ERP. La Junta de Usuarios del Sector Hidráulico Menor Chira Clase A, plantea un pedido para que se les permita salvar sus cosechas, expresan la parte regulatoria que precisa que ante un estiaje tienen preferencia los del valle del Chira; esta circunstancial posición se fundamenta en la sequía extrema que ha llevado a la pérdida del stock de agua de la represa de Poechos, distrito de Lancones, provincia de Sullana, en la región Piura.
Refiriéndose al agua, el Econ. Juan Manuel Aguilar Hidalgo sintetiza “Más árboles más agua. Si queremos asegurar el agua, necesitamos plantar más árboles” y en parte es verdad, sin embargo, la actual decisión toca las puertas del análisis real de la actual situación, de los retos del ahora y el futuro y un buen diagnóstico y mucha acción.
De las lluvias intensas a la sequía extrema
La idea que subiste a través del tiempo, es que el agua la provee la naturaleza o para los religiosos es un “regalo de Dios”; en realidad, en términos objetivos, el agua tiene esos misterios de dar vida y en sus diversas manifestaciones también ocasionar lo inesperado y en este caso, el recurso hídrico ha reflejado una realidad que nadie presumía se podría presentar. Son momentos de sequía, como antes lo fueron las altas precipitaciones.
Los piuranos y piuranas, conocen mucho de lluvias intensas, de inundaciones e incluso hasta de pérdida de cultivos por las precipitaciones, pero en el caso del estiaje la recurrencia es menor, pero siempre una lluvia estacional salva los inconvenientes. En todo caso, tras un déficit temporal, la divina naturaleza provee el tan apreciado recurso, necesario para la vida humana y también para la agricultura y actividad pecuaria.
La cuenca del Catamayo- Chira
La cuenca del Catamayo- Chira, ancestralmente ha proporcionado agua para territorios del Ecuador y del norte del Perú. Un río extenso transportaba las aguas desde las alturas de la sierra del vecino país, hasta la desembocadura de Colán, que con singular interés hemos desarrollado en el Diario El Regional.
Las condiciones han cambiado desde la década de los 70. El Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas a cargo primero del piurano Juan Velasco Alvarado y después por Francisco Morales Bermúdez, ejecutaron la obra de ingeniería con mayor capacidad de almacenamiento del país; el proyecto se hizo con ideas existentes, que desde la capital departamental planteaban que las aguas del Chira, no se pierdan en el mar y sean canalizadas hacia la cuenca del Piura.
Prevista para almacenar mil millones de metros cúbicos, la represa permitió ampliar la frontera agrícola y conforme se fueron ejecutando más metas, se dotó de agua permanente para tierras de cultivo de Piura y Sechura, sumándose a las existentes de Sullana, Paita y Talara. El stock en términos generales se administraba bien, excepto algunas situaciones tras el exceso de lluvias y en el presente año que marca la excepción.
Posteriormente, Ecuador comenzó a regular las aguas del Catamayo y por ende restándole caudal al lado peruano; esta situación poco a poco fue afectando el stock de agua y se ha hecho mucho más evidente en las actuales condiciones. El menor caudal, por lógicas razones será aprovechando por quienes se encuentran en la parte alta de la cuenca del Chira, en desmedro del lado peruano.
El desarrollo de proyectos de agroexportación ha incidido en la disponibilidad del recurso hídrico, aunque la mayor parte de ellos, usan riego tecnificado, lo cierto que generan una demanda que, en casos de sequía extrema, causa limitaciones para el agricultor local, que sumado al cultivo del arroz, que usa el riego por inundación, perdiéndose significativas cantidades del agua asignada.
Frente a la realidad deben realizarse investigaciones incorporando variables, no solo como las del cambio climático sino igualmente considerar el aspecto cultural reflejado en los tipos de cultivos prevalentes en la región Piura. Riego tecnificado, productos que demanden menos agua y cautelar los impactos hídricos por cada sembrío, de tal manera que no se beneficien otros territorios merced a la huella hídrica.
Represa de Poechos y situación actual
De acuerdo a la actual realidad, con la misma infraestructura de los 70, se sigue atendiendo más área agrícola, igualmente se ha desarrollado en zona adyacente a uno de los canales la Planta de Tratamiento de Agua Potable que provee a los distritos de Piura, Castilla y Veintiséis de Octubre; y, a esta mayor demanda se agrega la sedimentación que ha quitado capacidad a la represa de Poechos. Esta situación debe profundizarse.
También se debe tener en cuenta, que en el área de influencia de la represa de Poechos, se han instalado estaciones hidroeléctricas que utilizan el agua de la represa para la producción de energía eléctrica. La sequía en la región Piura, obliga a mirar, adicionalmente al déficit hídrico, plantear alternativas para la producción de energía eléctrica, mediante fuentes solares o eólicas.
La región Piura en general, tiene condiciones climáticas extremas, en el caso de precipitaciones abundantes, la mayor cantidad se pierden en el desierto en el caso del río Piura o en el Oceano Pacífico en la cuenca del Chira. Tras las inundaciones habidas en el 2017, los estudios planteaban la construcción de polders que permitan almacenar el agua, como reguladores de la masa y para usos económicos tras el evento. Más allá del sueño, nada es realidad.
Debido a la superposición de competencias, nada está definido con claridad en el Estado, comprendiendo en él a los 3 niveles de gobierno. Por ejemplo, los gobernadores se dedican a realizar pistas y el actual no es la excepción; perdiendo la gran oportunidad de ejecutar proyectos hidráulicos que justifiquen la demanda actual en función a las nuevas condiciones.
Existen proyectos planteados para ejecutar nuevas represas utilizando el agua de los ríos de Piura,que en tiempos normales proveen el líquido elemento, pero que en situaciones diferentes causan estragos en las familias y en la economía. Se puede gritar ahora, cuando no se planificó nunca; los gobernadores no sirven para mucho, salvo para vanagloriarse de sus ideas, pero no de sus acciones.
Tiempos difíciles para soluciones sostenibles
La sequía ha sido igual de destructora que las lluvias intensas; tanto como se reclama aún que se prepare el territorio para que las aguas fluyan, ahora se pide que se reserve para mañana lo que puede abundar en algún momento. La planificación es fundamental pensando en las potencialidades que tiene la región Piura; sin embargo, dicho proceso sin ejecución no tendría mayor valor, como lo que sucede con el Alto Piura.
Esta situación de igual manera lleva a mirar la situación energética, para evitar lo sucedido en el Ecuador. En Talara y también en El Alto, es decir en los tablazos, existe viento más que suficiente para producir energía eléctrica. Si Piura pretende mejorar sus niveles de competitividad regional debe comenzar a planificar de verdad, no repitiendo que se tiene un "Plan nunca antes hecho" sino haciendo carne de lo identificado y otorgándole valor con el uso del mismo.
Conclusión
Tanto como sucede con las lluvias extremas, la preocupación de todos los actores sociales y económicos crece con la sequía, después poco a poco se va perdiendo el interés cuando se resuelve el problema. Eso no debería suceder y por lo menos, debería sistematizarse lo acontecido, para planear soluciones en el corto, mediando y largo plazo.
Asimismo, recordar que los gobiernos regionales, son entidades competentes para ejecutar proyectos de impacto regional y no pequeñas municipalidades cuyo interés mayor es ejecutar pistas y veredas que no les corresponde. Tales iniciativas son para las municipalidades. .
ERP/AVC