ERP. En medio de muestras de pesar y congoja de la afición deportiva de Sullana, fue llevado en hombros por sus voleibolistas hasta su última morada José Rojas Romero "Rojitas", al cementerio "San José". El cortejo fúnebre fue matizado por los acordes de temas como "La Vida es un carnaval" de Celia Cruz y los Mambos de Pérez Prado, canciones que él mucho apreciaba y eran sus preferidos.